Cartografía culinaria: los platos típicos gallegos de Navidad
Las fechas navideñas resultan muy apropiadas para conocer la gran riqueza gastronómica de Galicia. Pues es durante estas semanas cuando los hogares reviven en los fogones el recetario tradicional de platos típicos gallegos y llenan las mesas con manjares que aúnan productos locales de gran calidad y arte culinario magistral. En esta entrada señalamos las comidas y bebidas más presentes en las Fiestas navideñas gallegas.
Galicia: territorio privilegiado para los foodie
El arte culinario gallego es venerado tanto dentro como fuera de Galicia. Por su gran variedad de sabores, por su recetario ancestral y por la calidad de sus alimentos, la cocina gallega conquista el paladar de cualquier foodie que se precie. Y ciertamente las Navidades se muestran como el momento ideal donde los hogares sacan a relucir su maestría gastronómica a través de los platos típicos gallegos más demandados.
En efecto, que Galicia destaca por ser un emplazamiento soñado para los amantes de la buena mesa no sorprende a nadie. Y es que pocos territorios son tan fértiles en alimentos orgánicos y comidas tradicionales como la región gallega; sea por ser un vergel agrícola; sea por sus entornos marinos ricos en peces y frutos de mar de calidad suprema.
Carnes exquisitas, mariscadas de infarto, pescados sabrosos, frutas y verduras que irradian su aroma y sabor con solo aproximarse a ellas, y unos vinos (y licores) que encandilan los sentidos… Estos son algunos de sus ases culinarios.
Es por ello que cualquier persona que comparta y deguste una buena mesa gallega comprende por qué Galicia cosecha tantas Estrellas Michelin y tantos premios enogastronómicos.
Pero sin duda uno de los periodos propicios para vivir las mejores experiencias gastronómicas se produce durante las Fiestas navideñas. Unos días donde las comidas se prolongan durante horas con sus primer plato, segundo plato, postre y sobremesa marinadas con charlas infinitas. ¡Y es que no hay nada mejor para combatir los fríos invernales atlánticos que una mesa cálida y nutritiva al calor de un hogar gallego!
Las claves del éxito de los platos típicos gallegos
La cocina gallega destaca por la calidad del producto autóctono y el buen hacer culinario, de origen muy antiguo. Pero lo más asombroso es que suelen ser platos relativamente fáciles de elaborar que solo requieren alimentos locales.
En cuanto a los productos locales, Galicia cuenta con una gran biodiversidad, una consolidada tradición agropecuaria y una agricultura considerablemente ecológica o biodinámica. Todo lo cual ya supone un plus de calidad, cualidades organolépticas y salubridad en sus alimentos.
De hecho, la dieta gallega ofrece un sabroso abanico de fitonutrientes que benefician a la salud y ayudan a prevenir muchas enfermedades.
Asimismo, la variedad de alimentos que conforman la cocina gallega se refleja en una atractiva presencia de platos coloridos, aromáticos y altamente sabrosos. ¡Un auténtico festival para la vista, el olfato y el gusto! Y qué decir de sus magníficas hierbas aromáticas, que evitan mucho consumo de sal y aportan un gran valor nutricional.
Por lo demás, la gran calidad de los alimentos autóctonos gallegos viene avalada por diversos consejos reguladores de denominaciones de origen o específicas, indicaciones geográficas protegidas, etc. En suma, existen numerosas etiquetas de calidad que ratifican las excelencias materiales y los valores inmateriales asociados a sus procesos de elaboración y producción. Tal como sucede con la carne (el porco celta o la ternera gallega) y la pesca (el pulpo, los percebes, las almejas…), los vinos y licores, la patata, los pimientos de Padrón, la miel y los quesos gallegos (por señalar algunas).
Estas tres características de la producción local gallega dotan a sus alimentos de una gran potencialidad como delicias gourmet.
Sobre la maestría gastronómica gallega, puede decirse que esta se basa en comidas hechas a fuego lento con mucho esmero, dedicación y mucho corazón. Y que, en general, se mantiene fiel a las tradiciones heredadas por los ancestros.
El enorme papel del arte culinario en el patrimonio inmaterial de Galicia se aprecia no solo en los hogares, sino también en los locales gastronómicos más tradicionales, como son los furanchos. Así pues, ¡no es de extrañar que el turismo gastronómico sea una de las principales razones para visitar Galicia!
Los platos típicos gallegos más consumidos en Navidades
La gastronomía tradicional de Galicia brilla en todos los platos dignos de una mesa completa. Es decir, destaca de ella tanto los primeros platos como los segundos, los postres e incluso las plácidas sobremesas. Y además tiene la virtud de que su arte culinario se acompaña con selectos vinos locales y licores artesanales que ensalzan aún más la experiencia gastronómica.
¿Pero cuáles son esas deliciosas comidas gallegas imprescindibles durante las Fiestas navideñas gallegas? Entre la gran variedad de esta fértil tierra atlántica destacamos las siguientes:
Entrantes y aperitivos
Las famosas empanadas gallegas artesanas de atún, carne, bacalao, bacalao con pasas, zamburiñas o pulpo. El secreto de su éxito estriba en su suculento relleno con cebollas y pimientos, y una masa fina y crujiente.
Las conservas mar o los patés gallegos también aportan mucho brillo a una buena mesa cuando se emplean para preparar vistozos aperitivos. Así, la delicadeza de las huevas de erizo, la ventresca ahumada de atún claro, las anchoas del Cantábrico en aceite de oliva o un rico paté de centollo o de gambas al ajillo elevan el caché de cualquier evento culinario. De ahí que las conservas gallegas sean cada vez más solicitadas como entrantes y tentempiés navideños.
Mariscos y frutos de mar
Siendo Galicia, en gran medida, una región costera, rica en peces y frutos de mar de toda índole, resulta lógico que estos conformen gran parte de la dieta gallega. Así, sin duda, una buena mariscada es plato típico gallego estrella de las comidas de Nochebuena, Navidad, Fin de Año y Año Nuevo. Cigalas, nécoras, camarones, centollos, percebes, gambas, mejillones y zamburiñas al natural, y largo etcétera dan color, sabor y aroma marino a la mesa gallega. Además son fáciles de preparar, pues solo necesitan hervirse en agua con sal y laurel, ¡y el manjar de los dioses está servido!
Otro plato marinero por excelencia, y muy consumido en estas fechas: las vieiras a la gallega gratinadas al horno. Colman el paladar de todo amante de la buena mesa porque la exquisita carne de vieira es cubierta por un sofrito de cebolla, apio y tomate y espolvoreada con pan rallado.
Pulpo á feira
Asimismo, puesto importante en los platos de una comida festiva lo ocupa el pulpo, ya que la zona del Atlántico gallego es rica en estos cefalópodos. Un alimento delicioso que admite diferentes recetas; aunque la más conocida es el pulpo á feira o pulpo a la gallega, sazonado con pimentón dulce o picante y regado en aceite de oliva. Puede ir acompañado de patatas (que si son locales, mejor que mejor).
Por cierto, lo que hace un alimento exclusivo al pulpo gallego es su delicioso sabor, lo cual se debe a que viven en las rocas y se alimentan de moluscos y mariscos. Amén de que se trata de un producto de proximidad, que puede adquirirse fresco, y por tanto no ha pasado por procesos de congelación ni largos trayectos de transporte. Algo que sí sucede con los pulpos importados.
Bacalao con coliflor
Sin salir de los manjares marinos, nos adentramos en los platos típicos gallegos más contundentes, donde los pescados son los protagonistas. En este sentido, el rey indiscutible en las comidas navideñas gallegas, principalmente en Nochebuena o Fin de Año, es el bacalao con coliflor.
Como la gran mayoría de platos de esta región, su elaboración resulta sencilla. Consiste en cocer en agua patatas y coliflor y, cuando estén tiernas, añadir el bacalao para que terminen de cocinarse todos los ingredientes juntos. Mientras, en una sartén se prepara un sofrito de cebollas a la juliana, ajos y sal; una vez la cebolla esté dorada y blanda, se le añade pimentón. Con esta ajada se decora por encima el bacalao, las patatas y la coliflor, ¡y manjar listo para conquistar a todos los comensales!
Merluza a la gallega
La merluza supone un pescado muy recurrido en todo evento culinario que se precie. Y es que la merluza gallega brilla por su calidad, frescura y sabor. Y especialmente cuando se trata de la merluza de Celeiro, capturada en las costas lucenses.
Con la llamada merluza a la gallega nunca se defrauda. De hecho, por algo es uno de los platos tradicionales gallegos por excelencia. Se prepara cocida en caldo donde previamente se vertieron patatas, cebollas, ajos, laurel y sal. Cinco minutos antes de que las patatas estén en su punto de cocción, se le añade la merluza. Aparte, se prepara una ajada de ajos fritos en aceite y rociados con pimentón; la cual se esparcirá encima de la merluza y las patatas una vez estén servidas en los platos.
Capón Asado
Aunque las aves no resultan tan aclamadas en las mesas festivas gallegas, sí hay algunos platos avícolas que aumentan su consumo en Navidades. Entre ellos destaca el riquísimo capón, una especie de pollo casero o gallo de corral castrado y cebado, de carne suave, jugosa y un punto de grasa espectacular. El capón gallego más famoso es el de Vilalba, pero también son muy demandados el gallo de Vila de Cruces o el gallo de Mos.
Se prepara al horno relleno con farsas de frutas, frutos secos, manzana u otro tipo de carnes, y acompañado de guarnición de patatas y otras verduras; su exquisito sabor depende en gran parte de que sea regado constantemente con los jugos que se desprende de su propia grasa. Pero otro tipo de receta tradicional de capón es aquella donde se lo cuece en forma de guiso, acompañados por manzanas, castañas o diversos tipos de verduras.
Lacón con grelos
Uno de los platos típicos gallegos más apreciado en los meses de invierno, tanto dentro como fuera de Galicia. Consiste en un cocido de lacón, chorizo, grelos y patatas, todos ingredientes locales y de temporada. Hay quien le añade pimentón y aceite de oliva. Si el plato se prepara con lacón y chorizo de porco celta en su punto óptimo de curación, entonces alcanza un sabor delicatessen total.
Cocido Gallego
Plato de cuchara emblemático en nuestras tierras, muy similar al lacón con grelos, el cocido gallego se diferencia de éste por incluir más porciones cárnicas y salazones, así como garbanzos. Así pues, un cocido gallego contundente llevaría además de patatas, grelos y garbanzos, cabeza y lacón de cerdo, panceta y chorizos. Por supuesto, un cocido gallego a base de porco celta intensifica su sabor y calidad y lo torna un plato de invierno irresistible.
Ternera gallega asada
La carne de los terneros nacidos y criados en Galicia y, por tanto autóctonos de esta región, es conocida por su excelente calidad y sabor. Al ser una carne tan tierna, limpia y sabrosa, cualquier comida elaborada con ella se convierte en una exquisitez que se deshace en la boca.
Así, uno de los platos típicos de la cocina galaica a base de carne roja es la ternera gallega asada. Un estofado que se confecciona con patatas (gallegas, por supuesto), a fuego lento y dejando de lado las prisas. Además de llevar diversos tipos de verduras (zanahoria, cebollas, ajo, tomate…) y especias, la ternera gallega asada incluye en su receta vino tinto hervido. Aquí la calidad del vino —por ejemplo, un crianza— marca la diferencia.
Postres tradicionales
Más allá de los dulces típicos de Navidad como el turrón o los polvorones, en los hogares gallegos no faltan postres tradicionales y autóctonos. Muchos de los cuales, por cierto, tienen un origen medieval. Hablamos de: torrijas embebidas en leche o con vino tinto y azúcar; las clásicas (¡y amadas!) filloas, que pueden degustarse solas o acompañadas de miel, nata, mermelada, chocolate o incluso helado; o el bandullo, un pudin muy gallego preparado con huevos caseros, migas de pan mojadas en leche, azúcar y frutos secos.
Sin olvidar otras piezas de repostería más dulces y elaboradas como la emblemática tarta de Santiago (a base de almendras, huevos y azúcar); los simpáticos melindres, bolitas con una elaboración similar a las rosquillas que, una vez fritas, se sumergen en un almíbar casero; o la golosa larpeira (tarta hecha con una masa similar a la del roscón de reyes, decorada con tiras de crema pastelera y humedecida con almíbar).
Vinos y licores
Pero obviamente tremendos ágapes han de ser regados con elixires dignos de su arte culinaria. ¡Y Galicia es una tierra sobrada en bodegas familiares que elaboran vinos y licores que revolucionan el paladar, así como promueven un viaje sensorial por todo su territorio!
No en vano, Galicia cuenta con aplaudidos vinos tintos y blancos pertenecientes a cinco denominaciones de origen vinícolas (Rías Baixas, Ribeira Sacra, Ribeiro, Monterrei y Valdeorras); así como a cuatro indicaciones geográficas protegidas (Barbanza e Iria, Betanzos, Val de Miño-Ourense y Ribeiras do Morrazo).
Si bien también existen vinos sin etiquetas, originales —algunos más clásicos, otros más innovadores—, que nada tienen que envidiar a los vinos gallegos más archiconocidos. Por tanto, siempre se puede encontrar un vino gallego idóneo para cada comida y cada paladar.
Sobremesas líquidas
Pero si los vinos son básicos dentro de la espectacular enograstronomía gallega, los licores de esta tierra no se quedan atrás. Así, no hay sobremesa que se precie sin unos chupitos de aguardientes de orujo y de licores tradicionales (como el de hierbas, crema de orujo o café). Carta a la que hoy en día hay que sumarle licores más innovadores como el licor de castaña, de mora, de grelos o incluso de toxo.
Sin olvidar ese irrepetible y bendito café de pota que tanto sabe a los humildes fogones de nuestros abuelos.
Sin duda, postres, chupitos y café son los culpables de las interminables sobremesas gallegas que nos sonsacan miles de confidencias y diálogos llenos de risas e ingenios.
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Referencias consultadas
- Díaz Madurga, L. (2023). Pueblos secretos y monumentales de España (donde, además, se come muy bien). Recuperado de https://bit.ly/3RjpBVp
- Marques Ávila, Á. (2022). Galicia, tradición culinaria en una tierra mágica. Recuperado de https://bit.ly/46kK5RZ
- Morón-Corujeira, N. y Fusté-Forné, F. (2021). La tradición enogastronómica y el turismo: el caso de los furanchos (Galicia, España). Recuperado de https://bit.ly/40WQJgh
